Sebastian Palacio reflexiona sobre las contradicciones que él ve en algunos sectores mapuche que se oponen al Plan Impulso Araucanía, cuestiona la masividad de una marcha contraria a este Plan, cuestiona los argumentos, descalificaciones y representatividad de un Werkén que, por la cultura mapuche, debiera someterse al mando del Lonko y no lo contrario como pareciera verlo hoy.
Escribe Sebastián:
El dia 26 de septiembre de 2018, en la comuna de Temuco, se llevó a cabo una marcha que tenía por objeto mostrar el descontento de un grupo de personas respecto del Plan Impulso, eventualmente representativo de los pueblos mapuches.
Con mucha "pompa" se señalaba en los medios de comunicación que la mencionada marcha fue "masiva" y que demostraba el verdadero repudio que dicho plan de desarrollo provoca en los pueblos mapuches. Sobre el particular, es necesario realizar algunas reflexiones sobre dicha manifestación y la interpretación que se puede hacer de ella.
En primer lugar, hay que ser sensatos con lo que uno verdaderamente es con lo que uno quisiera ser. Se sostiene que fue una multitudinaria marcha, dando ha entender que lo manifestado es el sentir de los pueblos mapuches. Segun estimaciones del INE la población mapuche asciende a aproximadamente a 1.700.000, y los partícipes de la "marcha" eran aprox., 1.500, es decir, el 0,1% de todo el espectro poblacional mapuche. En definitiva, la participación de menos del 1% de la población mapuche no puede considerarse como representativa.
Otro aspecto que llama la atención es que un "werken" (mensajero en mapudungun) de apellido Carbone Queipul señalaba que el presidente Piñera era empresario y que por ese motivo era evidente que el Plan Impulsa sólo benificiaria a los ricos o dueños del país. Notoriamente el "werken" cae en una falacia argumentativa llamada "falacia ad hominem" la cual consiste en tratar de desvirtuar los argumentos de mi contrario en base a sus características o cualidades personales más que por sus argumentos. Piñera (dejo claro que no es una apología de mi parte hacia él), en la lógica del "werken", cualquier cosa que haga va a estar mal por el sólo hecho de que es o fue empresario, notoriamente un argumento con poco piso.
Lo anteriormente señalado es bastante objetable, el hecho de descalificar a una persona por sus cualidades u oficio es una forma de discriminación, incluso una manifestación de odio. Más aun, cuando en épocas pasadas y hasta hace poco, a los indígenas precisamente se les denostaba utilizando la falacia ad hominem, se decía, por ejemplo de los pueblos mapuches, que eran flojos y que por tal motivo no progresaban. Utilizar el prejuicio, el odio, la descalificación a la persona es un vía que aquellos que sufrieron la discriminación y el prejuicio no pueden utilizar, por un asunto de lógica: no trato a los demás como no me gustaría que me tratasen.
Otro punto muy preocupante fue la "demonización" del Lonko (cabeza o jefe en mapudungun) Aniceto Norin quien se ha mostrado a favor (junto con un gran numero de personas) del Plan Impulso y la paz en la Araucanía. Lo llamaron "yanacona", es decir, un guerrero del enemigo. ¿Cuán democratico resulta ser llamar yanacona a alguien que piensa distinto? Obviamente que muy poco. Recordar que Norin fue condenado por terrorismo en 2003 y luego la CIDH acogió el reclamo planteado por su defensa en el sentido de que se habían vulnerado Derechos Fundamentales en su proceso. Norin es un ejemplo de resiliencia.
Demonizar al que piensa distinto es propio de regímenes totalitarios: los disidentes de Hitler eran enviados a Auschwitz, Sobibor o Treblinka; los disidentes de Stalin eran enviados a Solovkí; los prisioneron políticos de Pinochet fueron enviados a Isla Dawson; los patriotas a la Isla Juan Fernandez. En definitiva, es alarmante la retorica del disidente como enemigo. Además, tambien se ha escuchado decir de algún "werken" su lucha contra el capitalismo, en otras palabras, si algun miembro perteneciente a los pueblos mapuche manifiesta su gusto por el sistema neoliberal automáticamente se convierte en disidente y por tanto, en enemigo (yanacona). Esto es manifiestamente contrario a uno de los Derechos Humanos más esenciales: la libertad de pensamiento, de gustos, de ideas.
Murió el Lonko, como concepto, o por lo menos están tratando de matarlo, de desplazarlo por la figura posmoderna del "werken" quien en la sociedad mapuche es un subalterno del Lonko, sólo se debería limitar a comunicar el mensaje del lonko, no arrogarse facultades que no tiene. La experiencia del lonko, su sabiduria está siendo reemplazada por la rebeldía del joven.
La inversión de capital siempre ha sido parte de la solución de grandes crísis, una empresa que recibe una inyección de recursos naturalmente que va a poder afrontar sus deudas de mejor manera. Los griegos debido a la depresión económica que sufrieron (2009) necesitaron un rescate financieron otorgado por 14 estados europeos representados por la Comisión Europea, BCE y el FMI. La figura del empresario o inversor archimalvado, salvo excepciones, es propia del Siglo XX, época en que se justificaba ese apelativo por existir una guerra entre el comunismo y el capitalismo.
Actualmente, hasta en Cuba (Constitucionalmente Comunista) existen empresas privadas, los chinos (con su comunismo sui generis) invierten constantemente en países y empresas privadas de occidente, todo parece indicar que Corea del Norte seguirá ese camino. Finalmente los únicos reductos de intransigencia y rigidez están en aquellos individuos que necesitan generar un enemigo común, alguien a quien hecharle la culpa: de las malas decisiones personales.
En conclusión, una marcha: no representativa, poco tolerante con el que piensa distinto y que fue fundamentalmente panfletaria.