Diversos medios y personas a través de la redes sociales repudiaron el corte de árboles que realizaron funcionarios municipales en el centro de Cañete, el hecho hubiera pasado con menor atención de no ser porque la ausencia de estos árboles provocó el dantesco espectáculo de miles de aves buscando lo que era su hogar por muchos años. La comunidad espera explicaciones de los responsables finales.
La mayoría de las publicaciones de inmediato buscaron responsables y las razones de esta depredación, por supuesto la responsabilidad final la hacían sentir en el Alcalde, aunque se supo que la orden venía del departamento de obras, al parecer por petición de algunos vecinos que reclamaban por estos árboles y pájaros que habitaban ahí, también se dice que a primera autoridad no habría evitado esta tala a pesar de las advertencias que habría hecho la encargada de medio ambiente del mismo municipio.
No ajeno a este hecho, nuestro colaborador Sebastián Palacios nos envía su opinión, así como la mención a la legislación que rige para estos casos:
El antropólogo estadounidense Marvin Harris sostenía que el hombre es la especie más peligrosa del planeta. Peligrosa consigo mismo, pero también con la naturaleza que lo rodea. Durante este sábado la comunidad cañetina tomó conocimiento a través de diferentes videos publicados en las redes sociales, de la tala de dos arboles que cobijaban a un centenar de aves; las que después volaban desorientadas buscando su árbol, su casa. Este espectáculo dantesco provocó entre los transeúntes y la comunidad un sentimiento de angustia y pena.
Sobre quienes cortaron dichos arboles y las razones que hayan tenido (si es que las tuvieron) no se sabe mucho aún. Existen comentarios que señalan al Director de Obras de la Municipalidad de Cañete Javier Rojas como el responsable de dar la orden, es decir, el autor intelectual. Otros comentan que fue para dar mayor visibilidad a las cámaras de seguridad del sector. Si bien es cierto que en ocasiones algunos árboles amenazan ruina, ya sea porque están podridos o porque interfieren con el cableado eléctrico, no es menos ciertos que, a primera vista, no existía tal amenaza de ruina en el caso en comento; esto porque al ver los troncos que dejaron tras la tala, se puede apreciar que no estaban podridos.
Sobre el obstáculo visual que ese hábitat supuestamente constituía, la solución más simple fue de cortarlos de raíz. No existió, evidentemente, una ponderación de otras alternativas también efectivas como una poda, o incluso la tala de un árbol y no de ambos.
¿Pero que causó tanta congoja y angustia entre la población? La respuesta a esta pregunta es que esos árboles no eran simplemente unos árboles, unas cosas, sino que eran el hogar, la casa, el hábitat de una colonia de aves (mirlos según algunos). Eliminar el hábitat de esos animales de una forma tan obscena fue lo que provocó el merecido rechazo en la comunidad.
No es la primera vez que la actual administración comunal a cargo de Jorge Radonich Barra se ve cuestionada por hechos de similar naturaleza. Hace un tiempo también se ordenó por parte de la Municipalidad talar árboles frente a la casa del jefe comunal, presumiblemente por orden del mismo Alcalde (ver última foto de más abajo).
Es posible que estemos ante la presencia de un daño ambiental de conformidad a lo establecido en la Ley N°19.300, sobre bases generales del medio ambiente.
En efecto, el artículo 51 de la ley 19.300 sobre bases generales del medio ambiente, señala que “todo el que culposa o dolosamente causa daño ambiental responderá del mismo en conformidad a la presente ley”. El daño ambiental se encuentra definido en el artículo 2° letra e) del mismo cuerpo legal en los siguientes términos: “Daño Ambiental: toda pérdida, disminución, detrimento o menoscabo significativo inferido al medio ambiente o a uno o más de sus componentes”. Entre los componentes del medio ambiente tenemos aquellos elementos físicos y naturales, como los árboles que sirven de hábitat para las diferentes especies.
Urge entonces esclarecen quien fue la mente maestra detrás de los hechos antes descritos, y que explique sus razones y que demuestre con documentos oficiales la necesidad de la tala.
Como se dijo no es la primera vez que ocurra algo similar. También existen depredaciones al bosque nativo en otros sectores de Cañete (Cayucupil) que merecen ser fiscalizadas y sus autores sancionados. ¿Qué pasa con los vendedores de leña nativa? ¿Cuentan ellos con algún plan de manejo? Toda esta vorágine predatoria obliga a que se tomen acciones por parte de ciudadanos empoderados y conocedores de sus derechos y del ordenamiento jurídico vigente. Es necesario abandonar la desidia y reclamar ante las autoridades competentes, ejercer la función fiscalizadora ciudadana. No porque algo lo haga la autoridad necesariamente se debe corresponder con lo permitido. En Cañete el argumento de autoridad o argumentum ad verecundiam es muy usado por los detentadores del poder.
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