A las 00 horas del 4 de noviembre comenzará la temporada de pesca de sardina y anchoveta para las embarcaciones artesanales e industriales que tienen saldo de cuota disponible. La Cuota inicial asignada este año para ambas pesquería fue de 314 mil 900 toneladas, incluidas las 122 mil toneladas adicionales de recursos que la Subpesca autorizó para el segundo periodo, desde la quinta a décima regiones. De acuerdo a información estadística de los desembarques, Sernapesca informa que a la fecha, se ha consumido el 73% de la cuota global anual, y que por tanto está disponible para captura el 27%.
En nuestra región se concentra el mayor número de embarcaciones artesanales dedicadas a la pesquería de sardinas y anchovetas. Son 614 embarcaciones que saldrán a capturar a contar de mañana, sólo en la región del Biobío.
Las embarcaciones artesanales deberán contar con GPS, de acuerdo a la normativa. Todas las naves mayores de 15 metros de eslora, y las iguales o mayores de 12 con arte de cerco que operan en la pesquería pelágica, de lo contrario la autoridad marítima no otorgará permiso de zarpe.
Recordemos que la veda terminó el miércoles 21de octubre, pero los estudios del Instituto de Fomento Pesquero, IFOP, no arrojaron buenos resultados para la zona centro, por eso el inicio de la segunda temporada se postergó.
Sardinas y anchovetas se destinan principalmente para ser procesadas como harina y aceite de pescado. Y a raíz del hallazgo histórico de 7 mil 500 toneladas de harina de pescado sin acreditación de origen legal encontradas en Coronel, Sernapesca dispuso de una Plan Especial de Fiscalización. Marta Araneda, Directora regional del organismo, señaló que “esperamos que los pescadores tengan una muy buena temporada, y que comprendan que nuestro objetivo no es entorpecer su trabajo sino resguardar los recursos hidrobiológicos para prolongar la actividad pesquera”. Sardina y anchoveta se encuentran en estado de plena explotación.
Araneda agregó que el plan de fiscalización incorporará la verificación de la exactitud de las declaraciones de desembarques artesanales, industriales y abastecimiento en las plantas reductoras, así como del funcionamiento de los sistemas de pesaje.
En primera instancia, la temporada debería extenderse hasta el próximo 9 de diciembre, pero todo depende de los monitoreos que se entreguen a la Subpesca.
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