Destacada productora y directora independiente de gran trayectoria en el área audiovisual y cultural, ganadora del premio Altazor en el año 2008 por el programa de TVN Fruto del país, Beatriz Rosselot valoró la trayectoria del festival, además de situar a la provincia de Arauco como un interesante destino filmográfico a seguir potenciando.
¿Cómo ha visto esta versión del Festival Internacional de Cine de Lebu?
Hoy en día tenemos pocas instancias para ver cortometrajes en festivales. A veces hay una categoría de cortos, pero esto es un festival dedicado a los cortos y eso es muy bueno por dos cosas. Históricamente el corto siempre ha sido el preámbulo del largo, es la carrera que los cineastas hacen porque tienen que consolidarse, ya que estamos hablando de una disciplina compleja y cara, partir por un corto es lo lógico.
Sin embargo, el consumo en las plataformas hoy donde vemos audiovisuales tan diversas que se han multiplicado con lo digital con lo electrónico, con internet es muy común hoy en día consumir más cortos que largos, porque puedes tener un trayecto de diez minutos y ver un corto o dos. Nadie quiere ver un largometraje fraccionado, pero si puedes ver cuatro cortos.
Hay muchísimos elementos y yo creo que el Festival de Cine de Lebu que en esta versión cumple 20 años, es una experiencia acumulada enorme. Es realmente para sacarse el sombrero. Hacer un festival de cine 20 años seguidos en las circunstancias que se hace en Chile es heroico. Hay que acarrear mucha gente, somos un zoológico particular. El área audiovisual es una industria bastante compleja, porque es interdisciplinaria, siempre hay muchas disciplinas artísticas y técnicas que intervienen.
Que este sea local, que se haga en un lugar pequeño dentro de toda nuestra geografía le da un valor claramente, que es el valor de lo propio. Además en un periodo estival que es el verano donde siempre es muy práctico y cómodo moverse en la zona.
Después está toda la importancia en la región, o sea, la Región del Bío Bío es una tremenda zona y que se haga en un rincón de esta, costero, puerto, caleta de pescadores. Es buenísimo, una particularidad a resaltar que lo hace propio y como te decía hace poco rato, veinte años estar haciendo este esfuerzo ha generado obviamente un eco, una resonancia en la sociedad, como por ejemplo cuando veíamos los documentales de las mujeres por ejemplo, y esa es un área donde el cine cumple un rol tremendamente importante, una función social de empoderamiento personal más que de generar grandes cineastas u obras que puedan competir a nivel internacional, ya que solo con el rol que cumplen terapéutico, formativo, creador de empoderamiento colectivo, de trabajo en grupo, de reconocimiento del otro, ya es poderosísimo en lo que logra.
¿Siente que hace falta apoyo para la industria fílmica?
Desde mi sector siempre te voy a decir que el apoyo es poco. ¿En qué me puedo basar para decirte que los recursos financieros que el Estado dispone para el desarrollo audiovisual son pocos? Con varias cosas. Primero que nada en los objetivos generales. ¿Queremos que Chile se destaque en el mundo? Ya que tenemos una particularidad geográfica, étnica, física, humana. ¿Queremos destacarla? ¿Qué queremos desarrollar? El turismo que viene aparejado con el éxito del cine internacional. También ¿Qué queremos comunicar en cuanto a relacionarnos con grupos diversos, otorgándole un valor especial a la diversidad dentro de esa posibilidad? Entonces, necesitamos más empuje, más ayuda para ciertas cosas.
Los recursos concursables son muy pocos, muy escasos, muy escuetos, todavía hay muy poca capacitación, formación, hay muy poca conciencia de que esto es un trabajo largo, ya que hay que trabajar bajo el alero de nuestra organización administrativa política, como lo son los municipios, los cuales o todos tienen recursos para poder concentrar algún porcentaje en apoyar a los grupos de filmación que lleguen desde afuera, ya sea dentro de nuestro territorio, ya que muchas veces si los iquiqueños tienen que venir a filmar a Arauco, casi que se van a sentir extranjeros y viceversa.
El otro parámetro para saber que los recursos son escasos, es lo que te decía, ¿Cuánto nos interesa que nos vea el mundo? Si nos interesa, tenemos que seguir apostando a nuestra calidad audiovisual y a tener premiso y que nos vaya bien fuera, porque es la manera que nos vean. Sabemos que la visibilidad pasa por el audiovisual y que una imagen vale un montón en la retina de la gente. Una buena o impactante película va a ser una gran diferencia en querer ir a recorrer un espacio físico el día de mañana y en ese sentido el parámetro que nos dice que tenemos una demanda insatisfecha en Chile es cuántos proyectos se presentan a los fondos en sus distintas etapas de desarrollo que tengan el porcentaje, que tengan la calificación de 'elegible' u 'óptimo para su aprobación' y siempre hay más de lo que podemos financiar.
¿Qué acciones concretas se podrían realizar?
Creo que instalar el concepto y la conciencia de lo que puede ser útil una comisión fílmica local para ayudar a los equipos de filmación internacional, es deseable, sobretodo fortalecerla en Bio Bio. Ninguna duda. Es deseable fortalecerla porque fue una de las primeras que empezó a funcionar en la Araucanía, también.
Necesitamos incrementar nuestras políticas públicas en cuanto a comisiones fílmicas, de manera de poder tener muchas más de las que tenemos. Tenemos que tener recursos para brindarles apoyo, capacitación, garantías, beneficios para los equipos de filmación del mundo, que puedan interesarse por venir a nuestro territorio y Arauco tiene su gracia y particularidad. Dentro de Arauco, cuando yo quiero ir a la playa a bañarme, nada mejor que Laraquete. Cuando quiero estar en una zona de pescadores neta, nada mejor que Lebu. Cuando quiero comer un Pulmay a la usanza local de siempre, nada mejor que cualquiera de nuestras caletas del sur.
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