“El grupo fue notificado de la resolución y comienzan así a dejar atrás toda una vida ligada a la educación de nuestra comuna”.
Seleccionados a nivel nacional junto a otros postulantes, 9 cañetinos, entre profesores y asistentes de la educación se vieron beneficiados entre los 1500 seleccionados con el denominado “incentivo al retiro”, que entrega un bono económico importante a quienes cumplen con la edad y deciden acogerse a jubilación.
El grupo fue recibido esta mañana por el alcalde de la comuna, Jorge Radonich Barra y el Director Comunal de Educación, Juan Bravo, quienes ante todo agradecieron el trabajo y el compromiso realizado con la educación de la comuna durante los años que han desarrollado su labor.
Se trata de los docentes Bernarda González Romero, Gorart Villarroel Torres, Luis Jorquera Jorquera, Jaime Pascal Pascal y Alfonso Veloso Novoa, a quienes se suman los asistentes de la educación Nolberto Molina Cuevas, Luis Vidal Aguayo y Gabriel Molina Arcil.
“Ha llegado el momento que han esperado por mucho tiempo, pero que junto con la satisfacción del deber cumplido trae un sentimiento de nostalgia por dejar atrás las aulas y una etapa profesional que sin duda ha dejado una tremenda huella en la comunidad educativa comunal”, sostuvo durante el encuentro el alcalde Jorge Radonich.
“Como alcalde, pero sobre todo como profesor y colega quiero hacer un reconocimiento a cada uno de ustedes por todos estos años y desearle que tengan un merecido descanso y que lo puedan disfrutar”, agregó la máxima autoridad comunal.
Con el retiro de los docentes y los asistentes seleccionados quedan atrás decenas de generaciones formadas y cientos de historias que nacieron al interior de las salas de clases de distintas escuelas y liceos de Cañete.
Bernarda González, la tía Beña, como la conocen todos los que alguna vez pasaron por la escuela de hombres de Cañete recuerda sus inicios. “Yo llegué a la gloriosa Escuela 1 en el año 1978 y me encontré con tremendos profesores. Estaba don Hipólito Palacios, el señor Rocha, el señor Cartes, la señora Marta Lozano, la señora Aída Martínez, Leonor (Abarzúa), Alicia Valenzuela, Rene Andrades. Eran tantos y tremendos profesores que me sirvió porque pude aprender mucho de ellos”, recuerda esta querida Educadora de Párvulos.
“Aprendí mucho de ellos y siempre estaré agradecida por ello, porque todas esas experiencias me sirvieron para rendir en el trabajo. Yo empecé en mi escuelita y termino en mi escuela. Siento un poquito de pena, pero lo que me reconforta que los niños de muchas generaciones no se olvidan de sus tías”, agrega emocionada la tía Beña.
Otro de los que dice adiós, dejando montones de recuerdos es Nolberto Molina Cuevas, el señor Molina, histórico inspector del liceo. “Me siento feliz de haber cumplido una etapa de casi 45 años en la educación. Me voy feliz y agradecido de Dios”, señala.
Nolberto Molina recuerda que comenzó trabajando en un anexo del Liceo de Hombres que funcionaba de manera vespertina. “Estuve ocho años como profesor de Matemáticas y después pasé a la parte administrativa en 1982”. Ahí permaneció viendo pasar a muchas generaciones hasta que en 2004 se trasladó al Liceo Alonso de Ercilla, cuando este comenzó a funcionar en el sector de La Granja.
Son muchas historias y recuerdos que se van junto a este grupo de educadores que tienen bastantes cosas en común. “Varios de nosotros fuimos compañeros en el liceo” recordó el profesor Luis Jorquera. Algunos incluso fueron compañeros toda la vida, por lo que hoy ponen nuevamente juntos fin a un ciclo más de sus vidas.
*** SIN COMENTARIOS INGRESADOS***