Reproducimos las declaraciones de José Luis Lincoñir, Director del Hospital de Cañete, que realizó en Radio Vanguardia, donde se escuda en una deficiencia actual del hospital para no servir a una noble causa, deficiencia que además suponemos depende de su administración pero que lo toma como casi una normalidad y ajeno a su responsabilidad.
Se lamenta el tenor de estas declaraciones donde muestra cero empatía y solidaridad con las personas que sufren y esperaban esta acción, donde en cada momento la minimiza y la hace notar más como una carga que como ayuda, sobre todo cuando reconoce que se le exigía condiciones a la entidad que la organizaaba en vez de ofrecer cooperar con quienes sin costo alguno ofrecían atender médicamente.
Muchas veces menciona en la entrevista, casi irónicamente, que solo 4 personas a atender eran de la provincia, como queriendo dejar un mensaje que esto sería el motivo más fuerte para no prestar el hospital, más que la falla en la climatización, dichos que por un lado hablan de una discriminación a otros pacientes.
Respecto a lo anterior, una fuente del Rotary nos indica que el ofrecimiento principal de los médicos era ponerse a disposición de pacientes que le presentara el Hospital y que se supone tiene en lista de espera, razón por lo cual el municipio se había puesto con una importante donación, pero al parecer no hubo esfuerzo ni intención en presentarlos y se prefirió decir que eran solo 4 para tener un argumento más para rechazar y no sentirte parte de este operativo.
A más de alguien se le vendrá a la cabeza una comparación con lo sucedido con el ofrecimiento del Avión "SuperTanker", donde el director nacional de Conaf se oponía a recibirlo arguyendo una serie de motivos y todos sabemos lo que pasó después. La opinión pública tiene los antecedentes y sabrá evaluar el desempeño de esta y otra autoridad de salud que hoy tenemos en nuestra zona